La resonancia magnética llega al vientre materno.
Desde hace varios años la ecografía ha permitido conocer el estado del feto mucho antes del alumbramiento. Así, se podía saber varios meses antes del nacimiento si el feto estaba sano o no, si tenía alguna malformación o padecía alguna enfermedad. De esta forma se podían tratar algunas de estas patologías, corregir problemas de salud o malformaciones y, cómo no, conocer el sexo del bebé.
Pero la tecnología avanza a pasos agigantados y, en el campo de las técnicas de imagen, en los últimos años ha ocurrido una auténtica revolución. Estas fotografías en dos dimensiones, en blanco y negro que nos proporciona la ecografía se han quedado obsoletas y están siendo reemplazadas por otras técnicas de imagen mucho más precisas.
Gracias a una nueva tecnología que transforma las imágenes de Resonancia Magnética y ultrasonidos en modelos tridimensionales de realidad virtual, los futuros padres podrán tener una reproducción mucho más veraz del bebé dentro del vientre materno, pudiendo introducirse con ellos en el ambiente placentario. Esta nueva técnica de imagen fue presentada la semana pasada en la reunión anual de la Sociedad Americana de Radiología.
La Resonancia Magnética se utiliza para los controles ginecológicos cuando la ecografía de ultrasonidos convencional no es suficientemente fiable. Esta técnica es capaz de ofrecer imágenes del feto y del ambiente que éste tiene dentro de la placenta con mayor resolución que con las técnicas de imagen convencionales que se venían utilizando hasta ahora.
Investigadores de la Clínica de Diagnóstico por Imagen de Río de Janeiro (Brasil) han sido los autores de esta nueva tecnología que acaba de presentarse. Estos especialistas han sido capaces de crear secuencias de Resonancia Magnética en forma de pequeñas capas que, superpuestas, tienen como resultado la imagen en tres dimensiones del bebé.
Esta tecnología selecciona las partes del organismo que tienen mayor calidad de imagen. Posteriormente, un programa informático es capaz de reconstruir el cuerpo completo del feto, incluida la placenta, el cordón umbilical, y las paredes del vientre materno.
Otra opción que ofrece esta técnica es la de combinar las imágenes obtenidas con tecnologías inmersivas de realidad virtual que proyectan el entorno en unas gafas VR. Así, la secuencia se puede manipular, pudiendo navegar por ella. También es posible variar el punto de vista para conocer más a fondo el estado del feto.
Esta técnica de Resonancia Magnética es muy útil tanto para el diagnóstico, como para la investigación sobre el desarrollo del feto, propósitos educativos o simplemente para que los futuros padres puedan conocer a su bebé antes del alumbramiento.
El resultado que se obtiene con estas imágenes es muy parecido al que tiene el bebé una vez nacido. Incluso permite aumentar la imagen para conocer el desarrollo de estructuras internas, como el tracto respiratorio, que ofrecen información de gran valor a los especialistas.
Para finalizar, decir que la tecnología tridimensional permite a los especialistas compartir la visión in situ del futuro bebé, así como debatir y establecer cualquier tipo de estrategia terapéutica.
A continuación les indicamos los centros del Grupo Scanner Vizcaya donde pueden realizarse una resonancia magnética o una resonancia magnética abierta.
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