El efecto del Covid-19 en el sistema nervioso
El efecto del Covid-19 en el sistema nervioso ha sido analizado por la revista Journal of Alzheimer’s Disease, y clasifica el daño cerebral causado por el coronavirus en tres etapas. Majid Fotuhi, director médico del Centro de Aptitud Cerebral NeuroGrow (Estados Unidos) y uno de los autores, ha solicitado una mayor investigación sobre los efectos a largo plazo de la Covid en el cerebro. También ha manifestado la necesidad de que los enfermos reciban una resonancia magnéticadel cerebro antes de recibir el alta meédico.
Marcadas deficiencias neurológicas en los enfermos graves
En palabras de Fotuhi, «estamos aprendiendo que un número significativo de pacientes hospitalizados de Covid-19 tienen varios grados de deterioro cerebral. Como comunidad médica, necesitamos monitorear a estos pacientes a lo largo del tiempo ya que algunos de ellos pueden desarrollar declive cognitivo, déficit de atención, niebla cerebral o enfermedad de Alzheimer en el futuro. Hay mucho que podemos hacer para promover la curación del cerebro en los pacientes de Covid-19, pero primero debemos entender la naturaleza y
la gravedad de sus déficits neurológicos. A nivel de los pacientes, es imperativo que se les haga una resonancia magnética de referencia antes de salir del hospital. El objetivo consite en tener un punto de partida para evaluarlos y tratarlos».
Los investigadores avisan sobre los problemas neurológicos de los pacientes que sufren de Covid-19. Accidentes cerebrovasculares, convulsiones, sentir confusión, mareos, parálisis o incluso el coma…los riesgos son numerosos. A día de hoy, existen mas de dos docenas de informes de casos que revelan el impacto de Covid-19 en los cerebros de las personas enfermas.
Tres etapas
La propuesta del estudio consiste en la adopción de un esquema de clasificación de tres etapas para poder tener una base a partir de la cual se construyan futuras hipótesis e investigaciones sobre el SARS-Cov2 y el sistema nervioso. En una primera etapa, el daño del virus se limita a las células epiteliales de la nariz y la boca y los principales síntomas son la perdida de olfato y el gusto.
Llegado a la segunda fase, el virus origina un flujo de inflamación. A este se le denominado «tormenta de citoquinas», y tiene su inicio en los pulmones, para después viajar por los vasos sanguíneos a través de los órganos del cuerpo. Esta tormenta de citoquinas causa la formación de coágulos de sangre que provocan derrames en el cerebro.
Situados en el último nivel, el nivel explosivo de tormenta de citoquinas provoca daños en la barrera hematoencefálica. Dicha barrera forma la capa aislante protectora de los vasos sanguíneos del cerebro. Así, el contenido de la sangre, los marcadores inflamatorios y las partículas de virus llegan al cerebro. Y tras esto, los pacientes desarrollan confusión, convulsiones, encefalopatía o coma.
Resonancia magnética antes de recibir el alta médica
El director medico de la investigación, Majid Fotuhi, indica que muchos pacientes con Covid-19 pueden no tener síntomas neurológicos perceptibles al principio; pero, en algunos casos, los pacientes pueden tener síntomas neurológicos incluso antes de la fiebre, tos o de la dificultad para respirar corréctamente. Además de realizarse una resonancia magnética mientras están en el hospital, subraya la necesidad de tener un control sobre los pacientes. Estas revisiones deberían de comenzar algunos meses posteriores a la salida del hospital.
«Nuestra experiencia con formas anteriores de coronavirus sugiere que a largo plazo los pacientes pueden desarrollar depresión, insomnio, enfermedad de Parkinson, pérdida de memoria o envejecimiento acelerado en el cerebro. Para aquellos que se recup
eran de Covid-19, recomiendo ejercicio regular, comer una dieta saludable para el corazón, reducir el estrés y mejorar el sueño; estas son formas críticas en las que los pacientes pueden rejuvenecer su cerebro y minimizar el tener malos resultados en el futuro», matiza Fotuhi.