Una vejez saludable
Pocas eran las personas que sobrepasaban la centena de años allá por el siglo XIX. En los registros apenas hay noticias de 10. Actualmente no es extraño que suceda algo así. Casi 15.000 personas lo hacen en el Reino Unido y en Francia a día de hoy el más longevo alcanza ya los 122. Hacia el 1850 casi la mitad los ciudadanos europeos fallecía sin llegar a los 45 años. A día de hoy esa mitad sobrepasará los 80 años. Factores como la limpieza del agua, la mejora en la sanidad pública y en el buen estado de los alimentos te pueden impedir lograr una vejez saludable.
Pero el reto de la longevidad no radica solo en el hecho de cumplir años, sino en vivirlos con buen estado de salud. Mantener una buena calidad de vida hasta el final . Y una vejez saludable es factible. Por poner un ejemplo, las mujeres españolas e inglesas viven mas de 80 años. Sin embargo las inglesas comienzan a tener problemas de salud cuando son más mayores que las españolas. Si nos ponemos a mirar la economía, nos encontramos con que las personas pobres llegarán a los 80 años arrastrando 10 años de mala salud. En cambio, las personas mas adineradas alcanzarán esa edad gozando de buen estado de salud.
En la conferencia ¿Por qué envejecemos?, Tom Kirkwood ratifica que «lo que está programado en el organismo es la respuesta al daño, que nos ayuda a sobrevivir siendo jóvenes, pero que en la vejez nos hace deteriorarnos. Lo que ve el médico cuando vas a tratarte es la acumulación de daños, y hay que ir a los orígenes. Si los examinamos encontramos el proceso de transformación fundamental de las células, el envejecimiento. La ciencia nos dice que el envejecimiento no es rígido, sino maleable. Si cambiamos la forma en que nos exponemos a las agresiones del medio y mejoramos nuestro mantenimiento podemos cambiar el curso del envejecimiento».
Muchos son los debates sobre cuales son los motivos que impiden que la longevidad siga aumentando. Factores como la obesidad, el tabaco o el alcohol provocan que una persona viva entre tres y cuatro años menos, pero el primero de ellos hace que se malviva 6 años antes del fallecimiento; además de requerir de cuidados especiales que no necesitan los otros. Actualmente la ciencia esta trabajando en cuidadores androides. Robots que puedan entender las emociones humanas y que estimulen la inteligencia de aquellas personas a las que cuida. La tecnología puede ayudar a dar asistencia e incluso compañía a las personas que lo necesiten. Las máquinas tienen paciencia infinita y no se cansan nunca. No es mala idea.
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